viernes, septiembre 26, 2008

Tristeza isobárica


Si yo fuera isobara me invadiría el desconsuelo. Como tan sólo soy un ser humano, me conformaré con emitir un lamento.
Lamento informarles que hace casi un mes que nos dejó la principal referencia meteorológica de este país. No es que haya fallecido, pero ya saben aquello que dicen cuando una cara que habitualmente aparece en la televisión, deja de hacerlo. Dicen que es como si uno se hubiera muerto.
Tambien cuentan que Jose A. Maldonado (Sevilla, 1944) descubrió la pasión por la predicción climática cuando un 6 de enero, ciertos monarcas de origen oriental le obsequiaron con un flamante gallo de Portugal. Esos que cambian de color al son que marcan las condiciones atmosféricas.
Su despedida del 28 de agosto me recordó en cierto modo a la despedida de otro grande en "El último pistolero", con esas emotivas imágenes recordando al personaje.

Hay quien todavía piensa que meteosat es un apellido.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Meteosat creo que es nombre propio, si es así debe ir en mayúsculas.